El domingo despertó con bastantes nubes y sobretodo viento pero como no hay nada que nos detenga, decidimos hacer otra pekeña aventura, Sa Volta des General en Banyalbufar. Alguien conoce de donde proviene este nombre??? Hagamos un poco de historia.
Este camino se denominaba Camí des Carabiners o Camí de Baix de Son Bunola. El nombre con el que se conoce en la actualidad se ha generalizado gracias a su uso en guías turísticas y excursionismo, proviene de la curva de la carretera Banyalbufar-Esporles en cuyas inmediaciones un antiguo militar tenía una propiedad.
El inicio de la excursión se encuentra en la carretera comarcal c-710. A la altura del kilómetro 85.5, en plena curva, nos encontraremos un parking donde podremos dejar el coche. Es importante no llegar muy tarde ya que el espacio es pequeño.
El camino en gran parte es pista de tierra, en algunos tramos hay piedras y una parte de asfalto cuando llegamos al Port des Canonge. La duración aproximada (siempre teniendo en cuenta el ritmo al que caminan los niños) es de 1 hora 15 minutos para la ida y para la vuelta al ser parte cuesta arriba sería de 1 hora 45 minutos. Es una excursión que se puede hacer perfectamente durante todo el año ya que si vamos en verano podemos darnos un chapuzón al llegar.
Iniciamos la excursión y lo primero que nos encontramos es una barrera de metal que no está cerrada, también se puede pasar usando una pequeña escalera de metal que, desde luego, será la opción que todos los niños usan.

Siguiendo con nuestra ruta, nos encontramos con una sitja y los más llamativo de todo, una pequeña cabaña del carbonero que se encargaba de vigilar el fuego. Vale la pena dedicar unos minutos a observarla e imaginar como debían vivir su día a día.
Una vez dejamos el camino de tierra y enlazamos con asfalto, nos indicará que ya estamos casi llegando a nuestro destino. Es Port des Canonge era un antiguo pueblo de pescadores el cual conserva su increíble encanto y donde hay una cala típica de la Serra de Tramuntana. No es de arena, está compuesta de grava y cantos rodados. Si encontráis un día bueno, es ideal comer en la playa pero en nuestro caso, comimos en una amplia esplanada, que nos permitió estar algo más resguardado del viento que hacía.
Los niños pasaron un rato increíble jugando por la zona hasta que decidimos volver usando el mismo camino de la ida, más tranquilamente ya que parte del camino es en pequeña subida hasta la bautizada por nosotros cova de ses galletetes.
- Es una excursión muy sencilla y además prácticamente todo el recorrido es a la sombra
- recordar que Si queremos empezar la excursión desde el punto kilométrico 85.5 conviene llegar pronto ya que el espacio para aparcar es muy limitado. Otra opción es empezar desde es Port des Canonge